Si estás buscando una mejoría estética corrigiendo las secuelas del pie equino, este procedimiento puede ser una buena opción para ti.
Soy la Dra. Claudia Nieto, cirujana plástica estética y reconstructiva en Bogotá, quiero darte información sobre la cirugía plástica estética correctiva para tratar las secuelas que deja tener pie equino o varo.
En la parte funcional del pie equino trabajo siempre con un ortopedista y la parte estética del manejo de las secuelas de volumen es totalmente realizada por cirugía plástica en un tiempo posterior, una vez corregida la parte funcional.
Lo primero que se realiza desde el área de cirugía plástica es la colocación de un expansor en la parte media del pie, el expansor es un dispositivo (bolsa inflable) al que se le coloca líquido en su parte interna para llenarlo y obtener una ganancia de piel este proceso dura aproximadamente 2 meses.
En una segunda etapa quirúrgica, se retira el expansor y un ortopedista realiza transferencias de tendones y osteotomías para corregir la deformidad y tratar devolver al pie su posición normal.Si bien en algunos casos el pie tiende a volver a su forma original después de un tiempo, es muy importante que el paciente asista siempre a sus controles de seguimiento, ya que este procedimiento es muy delicado y los huesos deben colocarse en los lugares adecuados. Cada procedimiento reconstructivo tiene un seguimiento continuo.
Para controlar y monitorear la piel durante el proceso de expansión, tú como paciente debes acudir al menos dos o tres veces por semana durante unos dos o tres meses al consultorio. No te preocupes, este procedimiento es indoloro, yo colocare la solución salina durante las consultas al expansor, haciendo que se expanda poco a poco y gane la piel que necesitamos para el segundo acto quirúrgico. Sin embargo, como mencioné anteriormente, es crucial que sigas todas las indicaciones que se te den.
Bueno, si estás buscando información para solucionar ya debes saber en qué consiste el término pie equino, pero hablemos un poco en resumen: El pie equino es una deformidad permanente en la que el pie presenta una forma o posición torcida, puede ser congénita, es decir de nacimiento, como en patologías congénitas de acortamiento muscular y alteraciones de la médula o adquirido “Pie equino adquirido” que puede ser por secuelas de poliomielitis (polio) o secundario a accidentes que produzcan alteraciones de la médula o alteraciones neurológicas.
El pie equino se caracteriza por tener una postura en posición lateral y una hiperflexión plantar, produciéndose una deformidad en la que el paciente no puede apoyar sobre la planta del pie en una superficie o caminar normalmente.Si sufres de esto es posible que al caminar o al estar parado te apoyes sobre el ante pie (dorso de pie), que no puedas caminar bien y que por la carencia de apoyo corporal tengas un callo en la parte lateral y hay deformidad en los huesos.
Principalmente, existen dos tipos de alteraciones:
A nivel muscular y estético, la patología de la poliomielitis y el pie equino provocan secuelas. Después de que se ha resuelto su problema funcional, a muchos pacientes todavía les disgusta el aspecto de sus piernas y desean someterse a un procedimiento estético para cambiarlo.
En casos reconstructivos como la poliomielitis y el pie equino, por ejemplo, los padres suelen traer al niño al procedimiento, mientras que en los casos estéticos, el paciente suele solicitar la cita para abordar el problema, lo que típicamente resulta en una baja autoestima y una asimetría de las piernas causada por una diferencia de grosor o falta de definición muscular. Los implantes de pantorrilla se utilizan para mejorar la apariencia.
Ya hemos dicho que el pie equino es una patología que se desarrolla como consecuencia de otras enfermedades. Por ejemplo, una lesión de la médula espinal causa daño neurológico, lo que impide que ciertos músculos funcionen, lo que lleva a una hiperflexión plantar.
2 horas aproximadamente.
30 días aproximadamente.
Aproximadamente entre 3 a 4 meses.
General.
Dado que una persona siempre tiene su polígono de apoyo en los pies, una persona con pie equino puede tener dificultad para realizar la acción de sostener su cuerpo, debe recurrir a una serie de posiciones incorrectas o anormales para lograr la estabilidad, lo que puede resultar en lesiones severas en la espalda y el cuello.Si tienes pie equino no solo puedes experimentar problemas y atrofias en tus piernas y pies, sino que la espalda también se puede ver gravemente afectada, manifestando dolor y molestias.
En algunos casos, los expansores se usan para tratar las secuelas secundarias del pie equino, que generalmente incluyen adelgazamiento y cicatrización de las piernas. Estos expansores se implantan mientras se obtiene la cantidad de piel necesaria para la correcta colocación del implante de pantorrilla.
Los humanos no somos homogéneos, por lo que es importante buscar una solución cuando la diferencia es evidente, como en el caso de las secuelas de poliomielitis o el pie equino, en donde se realiza una corrección volumétrica mediante implantes y en algunos casos se puede utilizar la grasa corporal según la zona a tratar para mejorar la parte estética. Sin embargo, es importante considerar otras opciones cuando la diferencia no es tan obvia.
Puede que no siempre sea necesario realizar una cirugía de reconstrucción para la secuela de pie equino. Botas ortopédicas, yesos y ejercicios específicos controlados pueden ayudar a corregir el problema en recién nacidos o bebés, pero si el pie aún no asume la forma normal de un pie sano después de estas medidas, se requerirá cirugía.
La corrección del pie equino causa numerosas cicatrices de diferentes longitudes y densidades que pueden estar ubicadas en el dorso del pie, antepié o zona del tobillo, algunas de las cuales pueden causar picazón y dolor. Sin embargo, estas cicatrices se pueden mejorar con intervenciones y/o la aplicación de láseres. La piel debe mantenerse hidratada porque el pie zambo es conocido por secarse y descamarse, lo que puede dificultar la capacidad del tratamiento para reducir las cicatrices.
Las cicatrices mal manejadas pueden hacer que el procedimiento no enderece la piel, lo que provocaría la recurrencia del pie zambo corregido.
Todos los procedimientos estéticos y reconstructivos tienen riesgos, por lo que es crucial que tanto tú como yo trabajemos juntos para lograr los mejores resultados. De esta manera, podemos ayudar a que la piel se expanda de manera más efectiva. Que las heridas creadas durante el procedimiento no cicatricen por completo, es una de las complicaciones. El sangrado puede ocurrir, y cada vez que ocurre, debe tratarse de inmediato para evitar que las heridas se infecten. La falta de elasticidad de la piel es otro problema que puede surgir, lo que hace que el expansor se salga cuando la piel se vuelve demasiado delgada. Si esto ocurre, se debe detener todo el procedimiento, debes esperar un tiempo razonable antes de volver a intentarlo y la piel debe expandirse adecuadamente antes de darle al paciente otra oportunidad.
Cuando la piel no se expande adecuadamente, existen otras opciones, como los colgajos, que en ocasiones resultan muy voluminosos y no son muy recomendables para esta zona.
Es importante que asistas a una evaluación para definir los costos, para saber cuáles son las mejores opciones reconstructivas en tu caso, hay que evaluar la necesidad de un tratamiento ortopédico inicial y posteriormente el uso de uno o dos implantes de pantorrilla o la corrección de cicatrices.La corrección funcional del pie equino es una patología que puede ser cubierta por la prepagada o EPS, la parte de volumen es considerada un procedimiento estético.
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